Foto: Pexels
Las tandas, un sistema de ahorro y préstamo popular en México, han sido señaladas por el Servicio de Administración Tributaria (SAT) debido a posibles consecuencias fiscales. Este tipo de ahorro informal involucra a un grupo de personas que aportan una cantidad fija de dinero durante un periodo determinado, y a su vez, cada miembro recibe el total de lo reunido en su turno.
La postura del SAT ante las tandas
El SAT, responsable de supervisar los ingresos y el cumplimiento de las obligaciones fiscales, ha indicado que su objetivo es asegurar que se paguen los impuestos correspondientes. Aunque las tandas operan mayormente en efectivo, lo que dificulta su rastreo, las operaciones realizadas mediante transferencias bancarias sí pueden ser monitoreadas. Esto podría levantar sospechas si no se declara el origen de los fondos.
Recomendaciones del SAT
Para evitar problemas fiscales, el SAT sugiere lo siguiente:
- Registrar a los participantes: Es importante tener un control de los nombres, fechas, ingresos y egresos relacionados con la tanda.
- Especificar el concepto en las transferencias: Al realizar una transferencia bancaria, debe usarse una descripción como «tanda» para evitar confusiones o sospechas de evasión fiscal.
- Limitar el uso de efectivo: Aunque las tandas y compras por catálogo no generan impuestos, cuando las contribuciones exceden los 15 mil pesos, los bancos están obligados a reportar estos depósitos al SAT.
Alternativas para evitar inconvenientes
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) recomienda explorar otras opciones de ahorro a través de instituciones financieras reguladas, que pueden ofrecer mayor seguridad y cumplir con los requisitos fiscales.
Mantener un registro claro y utilizar las transferencias bancarias adecuadamente son medidas clave para evitar problemas con el SAT al participar en una tanda.